Siempre en primera línea como
sanitarios, ahora también están cumpliendo como héroes.
La Farmacia es un servicio
sanitario de primera necesidad y, en estos momentos tan complicados, se han
convertido en un importante dique de contención al que acuden muchos pacientes
preocupados por su salud y la de sus familiares. Es posible que este estado de
alarma la coloque en la posición que merece.
Ahí están, disponibles en todo
momento y colaborando como siempre han hecho. Es importante su trabajo
asistencial porque están reduciendo la presión de quienes se sienten enfermos y
desorientados además de mantener sus actuaciones habituales.
La tarea de los farmacéuticos va
más allá de la simple dispensación de medicamentos a la que muchos suelen
limitarla. En momentos como el actual despliegan su habilidad y conocimientos
facilitando su ayuda a quienes acuden a la farmacia. En muchas ocasiones
generan una enorme tranquilidad a los pacientes que les permite sobrellevar sus
preocupaciones con una menor ansiedad.
Sigue siendo necesario mantener
las condiciones previas y existen limitaciones en la dispensación que debemos
comprender y respetar. Tampoco pueden invadir el espacio de otros profesionales
sanitarios para no caer en el intrusismo del que, en ocasiones, han sido
acusados. Y, por supuesto, deben cumplir todas las medidas de protección
señaladas por las autoridades.
Cuando acudas a la farmacia debes
comprender la situación y saber que quien te está atendiendo desea ayudarte. Es
importante evitar las situaciones de tensión que algunos han tenido que
soportar porque no son culpables de que el medicamento que necesitas no haya
llegado o de que el alcohol del que crees que depende tu vida se haya
terminado. Ten paciencia porque te lo proporcionarán en cuanto sea posible,
seguro.
RESPETEMOS LA LABOR FARMACÉUTICA
Y COLABOREMOS CON ELLOS PARA QUE PUEDAN PROPORCIONARNOS UNA BUENA ATENCIÓN
SANITARIA.
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